En mi cuenta de Instagram compartí un poema sobre un diálogo que tuve con mi tía Sara cuando era chica. Confieso que esa conversación se me venía muy seguido a la cabeza con alguito de culpa. Porque ella quería que yo le llevara flores al cementerio. Y lo hice muy poco. Pero no fue hasta que escribí el poema que pude resignificar mi manera de recordarla y de expresarle mi cariño y gratitud por todos los años que compartimos juntas.
✏ Por eso, la consigna es esta: escribí un diálogo que haya sido importante para vos, transformándolo en poesía. Y acá hago una salvedad: no te enrosques en “cómo escribir poesía”, hacelo intuitivamente cuidando, sobre todo, la elección de tus palabras. En la poesía cada palabra señala un detalle: una emoción, un aroma, un recuerdo, un sonido, una forma. Experimentá con el lenguaje y dale a esas palabras un sentido especial. (spoiler alert: ¡en julio se viene la primera edición de mi taller de escritura poética! Podés ir leyendo los avances de esta propuesta acá).
Sin pensarlo demasiado, ¿qué diálogo escribirías? ¿A quien involucraría? Te leo en los comentarios 🙂