Cíclicas.
Salvajes.
Voces de la naturaleza.
Días.
Noches.
Matices.
Vivimos con la vida como reflejo y con la muerte como sombra.
Vida y muerte en el calendario de nuestro universo.
Mujer que siente
el frío en la garganta
el calor en los ojos
la lluvia en el útero
el viento en los pómulos
los años en los huesos
el corazón en el cuerpo
la respiración en los tejidos
el silencio en las uñas.
Somos brujas
una vez al mes
todos los meses
todos los años.
El paréntesis de la menstruación
del rojo carmesí
de la sangre que sana.
El momento:
de la introspección
del silencio
del cuerpo
del instinto
de la consciencia
de la aceptación
del todo que somos y del todo al que pertenecemos
de la visión
del fin de un ciclo
del comienzo de uno nuevo
de la no-velocidad
del suspiro
de los pechos que pesan
del vientre que se hincha
de los labios que se manchan
del reposo
de la meditación
de la sensibilidad
del amor intenso
del amor espiritual
del amor sexual
de la oscuridad como origen (de ahí venimos)
de la oscuridad como encuentro (la llave)
de la visualización como sueño creado en estado consciente
de los sueños como expresión de nuestro inconsciente que nos habla:
con animales de poder
con figuras misteriosas
con personas fantasmas
con señales no subtituladas
con formas extrañas
con haces de luces de mil colores.
Mujer:
cíclica
primitiva
silente.
Mujer Bruja.
Poesía inspirada en el libro “Luna Roja” de Miranda Gray.
Tatiana Villaseca
Jime bella, mañana voy a concurrir por primera vez al Círculo de Mujeres, algo que espero hace años. Tus palabras no hacen más que decirme que voy por el camino correcto. Abrazo rojo!
Jime Sánchez
Yo lo tengo pendiente! Después contame qué tal fue 🙂